Archivo
De RAÚL R. VEGA .
El atleta keniano bajó de la mítica barrera de las dos horas en el maratón.
¿Cuántos récords le quedan por batir al ser humano?
La marca conseguida en Viena no será homologada por todas las ayudas que recibió.
Eliud Kipchoge, duante el INEOS 1:59 Challenge en el que hizo un maratón en menos de dos horas. INEOS 1:59 CHALLENGE
Maratón de Viena. Ganador: Eliud Kipchoge. Tiempo: 1:59.40
Eliud Kipchoge,despierto desde las 4.50, sonreía a las ocho y cuarto de la mañana, era un hombre tranquilo y abrigado con sus manguitos blancos, listo para alunizar en El Prater de Viena y rebajar esa frontera temporal imposible: menos de dos horas en maratón. Hace una década lo dábamos por imposible, pero por eso nace gente como Kipchoge.
Todo estaba listo, Eliud, el inmenso circo Ineos a su alrededor y la niebla, que no iba a quedarse fuera de semejante acontecimiento. El tiempo también ayudaba: grado más, grado menos… hacía fresquito.
La prueba se convirtió en la sinfonía perfecta, ajustada al milímetro a todas las previsiones, con las siete liebres volando cual flecha invertida, persiguiendo incansables, sobre sus zapatillas mágicas, el rastro verde del coche de carrera y cobijando en su interior a Kipchoge. Al keniata se le vio poco dentro de aquella caja fuerte, pero allí estaba. No flojeó un solo instante.
2.50 era el ritmo a seguir durante los 42 kilómetros, 20 kilómetros y poco por hora, y Kipchoge apenas se movió de ese registro, compensando algún 2.52 suelto con otro 2,48. Un ordenador sin fallo en el cuerpo de un keniata que apenas varió su gesto durante la carrera.
Los parciales se fueron cumpliendo: el 10.000 cayó en 28.20, unos diez segundos por debajo del reto, misma frontera para la media maratón. No habían llegado a la hora y media cuando cruzaron por el kilómetro 30 (-9 segundos), la puerta del muro, cuando el cuerpo comienza a quejarse en voz alta, buscando energía en cualquier rincón. Kipchoge siguió a lo suyo, 2.52, 2.48, 2.52, 2.48, mientras campeones olímpicos, mundiales, europeos y vecinos de Kapttagat orbitaban alrededor, junto a su mánager, Valentijn Trouw, pedaleando cerca y aportándole hidratos, sales… gasolina.
A 20 minutos de la proeza, tan cerca y tan lejos aún, a Kipchoge se le vio sonreír, mueca reflejo de cansancio, pero el ritmo no se alteró (2.50, 2.50, 2.50 en el 33, 34, 35). Curioso el mundo de la perspectiva: con la cámara frontal, el séquito parecía marchar a ritmo de paseo; en el plano lateral, volaba.
Con el registro en 1.45, llegó el último relevo de las liebres, con el gran capitán Bernard Lagat escoltando el camino de Kipchoge, ese pequeño primer paso en su luna. 2.50, 2.50, 2.50, tic-tac, tic-tac. Ya solo una pájara podía evitar el milagro.

Kipchoge bajando de las 2:00 en Maratón
A falta de 400 metros, todos se apartaron y Eliud Kipchoge se quedó solo frente a la historia: 1.59.40. La marca no será oficial pues sobraron ayudas, pero ayer, por primera vez, un ser humano corrió una maratón por debajo de la dos horas. Y eso, homologable o no, es y ya será por siempre inolvidable.
Click aquí para conocer más noticias Running
Cinco motivos por los que la marca de Kipchoge no es oficial ni récord del mundo.
PARA QUE LA IAAF HOMOLOGUE UN RÉCORD TIENEN QUE CUMPLIRSE UNOS REQUISITOS MÍNIMOS
Eliud Kipchoge se ha convertido en el primer atleta en bajar de las 2.00:00 en maratón con un tiempo de 1.59:40. La hazaña es evidente, supone correr cada 100 metros en 17 segundos durante 42,195 kilómetros.
Pero, más allá de la dificultad que tiene mantener ese ritmo durante todo el trazado, que es evidente y admirable, la marca no será homologada porque la Federación Internacional de atletismo (IAAF) precisa que los récords del mundo deben realizarse bajo unos criterios, que el reto INEOS no cumple. Estos son cinco de los motivos por el que el tiempo de Kipchoge no formará parte de las estadísticas históricas del atletismo.
¡¡Kipchoge baja de las dos horas en maratón con 1.59:40 en el reto INEOS!!
– Es una carrera no oficial, no está controlada ni organizada por la IAAF ni por la federación del país donde se celebra.
– No hay al menos tres competidores que busque la victoria en la prueba (en el anterior reto de ‘Breaking2’ sí lo había).
– El recorrido no está certificado ni medido por un organismo oficial.
– No hay control antidopaje (obligatorio para que un récord se homologue)
Los relevos para el récord de Kipchoge: una coreografía perfectamente entrenada
– Estuvo acompañado de un coche que le marcaba el ritmo, además de liebres que entraban y salían de forma rotatoria por lo que entraban descansadas (las liebres en carrera realizan todo el recorrido hasta que deciden retirarse).
© MARCA.COM Avda de San Luis 25 – 28033 MADRID Una web de Unidad Editorial
Click aquí para ver más artículos sobre Running
De marca.com